Al decidir redecorar completamente nuestro hogar, podemos decidir para hacerlo entre varias ramas u opciones relacionadas con diferentes ramas de decoración, a las cuales nos podemos aferrar en el momento de realizar el plan de diseño. Uno de esos planes o ramas utilizadas en los últimos tiempos, que logra estar en auge por su simpleza y su dedicación al interiorismo.
El estilo zen es básicamente una expresión minimalista, que puede a partir de sus principales rasgos crear todo un mundo cuya principal característica es la presencia de lo simple, con un toque muy actual y relajado; no cuenta con demasiados objetos decorativos, debido a que estos quitan la sensación de paz y calma que pretende lograr este estilo. Los colores que normalmente son utilizados son aquellos que suelen denominarse naturales o dulces, como el beige o el gris, que pueden estar realzados por colores más vivos como los rojos.
Una de las principales bases para la decoración zen es la comodidad, por lo que los principales objetos de esta rama de decoración son las alfombras (muchas veces con formas geométricas poco numerosas) y también los cojines cómodos. Además, algunos recipientes con flores pueden ayudar a conseguir el efecto deseado.
En cuanto a los muebles que utilizaremos para este tipo de decoración, encontramos los minimalistas, que tengan como principal característica la depuración de cada uno de ellos en líneas rectas. Además, no hay que olvidar las cortinas, que son fundamentales para la decoración de este tipo, ya que aportan a la luminosidad de la pieza y el tono de los colores.
