El bricolaje es una afición que mucha gente practica en sus ratos libres, pero que otra mucha no quiere ni oír hablar de ella. El problema reside en que puedes necesitar de alguien que te ayude en momentos puntuales de tu vida diaria dentro de tu propia casa. Pero además, puede suceder que se te dé muy bien la carpintería, pero eso no hace que también controles la electricidad.
Por ello, los seguros actuales están ofreciendo servicios de bricolaje gratuitos junto a la contratación del seguro del hogar. Este tipo de coberturas pueden resultar muy valiosos para ciertos ámbitos domésticos, como puede ser:
-Electricidad:
Dentro de esta categoría, estarían cubiertos distintos trabajos como pueden ser la sustitución de bombillas, fluorescentes, enchufes, interruptores, etc. También podríamos solicitar servicios relacionados con el cambio o instalación de lámparas o servicios estéticos como la ocultación de cables mediante canaletas. Otras actividades de las que nos podríamos aprovechar gracias a nuestro seguro sería la configuración de aparatos electrónicos, como pueden ser tv, dvd, ordenador, videoconsolas, etc.
-Carpintería:
Esta clase de servicios nos podrían solucionar problemas relacionados con el montaje de muebles o la instalación de estanterías, el cambio de manetas o embellecedores de las puertas o la instalación o arreglos de bisagras, tanto en puertas como en armarios. Otra de las ventajas de tener nuestro propio servicio de bricolaje sería la de la colocación de cuadros, espejos o accesorios de cocina o baño.
-Fontanería:
Las actividades relacionadas con la fontanería pueden ser las más solicitadas, ya que es bastante normal sufrir percances con la cisterna o el goteo de los grifos. Gracias a este servicio vinculado al seguro de hogar tendríamos esos problemas cubiertos, además de sellados de silicona, desatascos o purgar los radiadores.
-Otros servicios:
También podríamos recurrir a nuestro servicio de bricolaje para solicitar la instalación de cortinas, arreglo de persianas, etc.
