En el artículo anterior que escribimos hablamos sobre todo lo que se relaciona con los consejos para mantener una vivienda fresca en el verano. Ahora continuaremos con otras recomendaciones que provienen de expertos en esta materia en cuanto al aire acondicionado y a los componentes que hay dentro del recinto.
Un consejo es reducir la cantidad de elementos que son fuentes de calor interior. Las más comunes son los electrodomésticos, los aparatos electrónicos y la iluminación. Si hay un exceso en este tipo de productos, la lucha contra el calor será más fuerte. Todos lo que tienen un buen poder adquisitivo y se dan el gusto de tener un aire acondicionado lo tienen que emplear de manera muy inteligente, debido a que en el caso contrario no se podrá aprovechar las virtudes que tiene el equipo, y el gasto de energía será muy grande y afectará de manera directa a nuestras finanzas.
En este sentido, hay que decir que nunca se tienen que colocar lámparas, televisores u otros aparatos generadores de calor, muy cerca del termostato del aire acondicionado.Esto se debe a que el calor de estos aparatos podría engañar al termostato haciendole pensar que la casa está mucho más calurosa de lo que realmente se encuentra. En ese caso, el aire acondicionado funcionaría más de lo necesario.
Además, se tiene que prestar una especial atención a la utilización de las luces incandescentes y los aparatos de calor. Cuando no sean necesarios deben estar desenchufados. De esa forma, sólo serán objetos que estarán en la habitación pero no generarán ningún tipo de cambio climático. Un buen consejo es cambiar las luces incandescentes por fluorescentes compactos, que son los que producen la misma luz pero sólo utilizan un quinto de la energía. La modificación no sólo es en el gasto, sino también en el calo que producirán.
