No solemos darle la importancia que se merece, pero sin dudas que la tiene. Es algo tan cotidiano, que nunca le prestamos atención a la hora de la decoración. Siempre lo miramos, todo el mundo está pendiente de él, pero nadie se toma el trabajo de integrarlo en la parte decorativa. Sucede que el reloj, viejo compañero de todos los hogares españoles, muy pocas veces entra en las discusiones de estilo o de decoración… Y vaya si lo utilizamos en el día a día con el fin de saber qué hora es, si estamos llegando tarde al trabajo o si nuestra cita está muy retrasada.
Para eso, lo ideal es siempre que el reloj concuerde con el estilo que le estamos dando al hogar. Y nada mejor que, si tenemos un estilo retro, conseguir esos relojes de pie que son sin dudas la gran atracción de la mayoría de las salas. Claro que estas piezas son muy difíciles de conseguir y, además, cuentan con un coste realmente elevado, por lo cual siempre es bueno tener otras opciones a la hora de decorar nuestra casa de la mano de los relojes y las agujas.
Un bonito reloj de pared, hecho de madera, también puede ayudarnos en el caso que nuestra casa tenga un toque rupestre o salvaje. De esta manera, quedará bien acorde a el resto de la sala y será muy bien ponderado por todos los invitados.
Pero… qué otra utilidad le podemos dar al reloj, en qué otros cuartos es necesario un reloj de pared… Estas son algunas inquietudes que nos deja la decoración. Como consejo, otro reloj de pared debe estar ubicado en la cocina, para calcular el tiempo de cocción de las comidas y ver si los niños llegan tarde a la escuela. Vamos, manos a la obra…
